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El diseño del hotel es increíble, cada rincón tiene un encanto especial. ¡La cena fue un verdadero deleite! Disfruté de una merluza que estaba para morirse y el ambiente fue perfecto para una noche romántica.

Lo recomiendo ❤️❤️

La atención personalizada de los propietarios fue excepcional, creando un ambiente acogedor y cálido. Además, las vistas desde la terraza son simplemente impresionantes.

El acceso a algunas áreas del hotel puede ser complicado debido a las escaleras, lo que podría ser un inconveniente para personas con movilidad reducida.

La decoración del hotel es única y encantadora, con habitaciones temáticas que capturan la esencia de la cultura árabe, creando un ambiente acogedor y mágico, ideal para un descanso reparador en Benahavís.

Mejorar el acceso a algunas habitaciones.

La comida en Benahavís es un deleite absoluto, especialmente en los restaurantes cercanos como El Guarda 1926, donde los platos son un espectáculo de sabores. Disfrutamos de unas tapas que te hacen bailar el paladar. Además, la habitación era muy amplia, y la comodidad de la cama no tiene precio. La piscina, aunque pequeña, era perfecta para relajarse después de un día explorando.

Decidimos no desayunar en el hotel porque el precio nos pareció elevado. optamos por un bar a un paso donde el café y el pan con tomate nos llenaron por menos de lo que costaba un desayuno en el hotel. Aunque la calefacción funcionaba, pasamos un poco de frío por las mantas, y dos de nosotros tuvimos que ponernos algo de ropa para dormir cómodamente.

Recomiendo disfrutar de la cena en el restaurante, la merluza es exquisita. Además, el ambiente en el jardín es perfecto para una noche tranquila.

Este hotel es un refugio elegante y tranquilo en Benahavís, a pocos pasos del Marbella golf club. La atención del personal es excepcional, y la pequeña piscina es perfecta para relajarse en familia. Además, las habitaciones son únicas y muy cómodas, ideales para descansar.

Mi mujer dice que sería genial tener acceso más fácil para los niños, ya que hay muchas escaleras que pueden ser complicadas.

El hotel es precioso, con habitaciones amplias y una atención encantadora. La decoración tiene mucha personalidad, y la piscina es perfecta para relajarse después de un ajetreado día.

Las escaleras son un verdadero juego de obstáculos, ¡espero no ganar el campeonato de lucha libre cada vez que vuelvo a la habitación!

El hotel destaca por su arquitectura única con detalles encantadores, además de contar con un personal excepcional que se preocupa por los huéspedes. La piscina es un buen lugar para relajarse aunque es un poco pequeña, y la comida en el restaurante es exquisita. Sin embargo, hay muchas escaleras que pueden ser un inconveniente para algunos.

Lo recomiendo para parejas en busca de un refugio romántico

Elegimos este lugar para una escapada romántica y no nos decepcionó. La comida era excepcional, especialmente el bacon y los huevos que Margo prepara en el desayuno, ese toque personal lo hace sentir como en casa.

No fue barato, pero el precio es aceptable para lo que ofrece.

Todo! Diseño de habitaciones único, atención excepcional del personal, deliciosa comida de autor en el restaurante.

El hotel es visualmente impresionante, con un encanto que te atrapa desde el primer momento. La habitación es amplia y muy bien equipada, con una cama extremadamente cómoda. La comida en el restaurante es un verdadero placer, y el surtido de frutas frescas es un detalle que se agradece. Sin embargo, el acceso a algunas áreas puede ser complicado por las escaleras, lo que podría ser un inconveniente para personas con movilidad reducida. Además, la piscina, aunque agradable, resulta un poco pequeña para lo que uno espera en un hotel de este nivel.

Comida riquísima y ambiente súper acogedor

La cena en el restaurante fue espectacular, el dueño se nota que pone mucho cariño en lo que hace. Probé el pato y estaba delicioso, y el ambiente del lugar es perfecto para pasar una noche romántica. Lo único un poco molesto fue llegar a la habitación, ya que la escalera es super estrecha y complicada.

El hotel tiene un ambiente encantador, con habitaciones temáticas que realmente destacan. La atención del personal es sobresaliente. Probar la cena en el restaurante fue una decisión acertada. la merluza que pedí estaba increíble y se deshacía en la boca. El desayuno, aunque no muy variado, fue de buena calidad y suficiente para comenzar el día. La decoración del hotel tiene un toque personal que se siente acogedor. Sin embargo, el acceso a mi habitación fue complicado por las escaleras, y la iluminación en la habitación podría mejorar, ya que en días nublados se vuelve oscura. La jarra para calentar agua estaba disponible, pero las bolsitas de té estaban al aire, lo que afectaba la higiene. En general, el hotel está bien cuidado, pero hay detalles de limpieza que necesitan atención.

La habitación estaba bien decorada, aunque el acceso fue difícil con maletas.